El Congreso de la entidad conmemoró, en Sesión Solemne, el 80 aniversario del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y reconoció su trascendente labor en favor del pueblo de México.
El acto ceremonial tuvo lugar en el Salón de Sesiones José María Morelos y Pavón de la sede legislativa, con la presencia del director general del INAH, el antropólogo Diego Prieto Hernández, acompañado del arqueólogo Luis Antonio Huitrón Santoyo, director del Centro INAH Estado de México, y la asistencia de invitados especiales e investigadores y trabajadores del Instituto en la entidad.
La Sesión Solemne fue encabezada por el diputado Nazario Gutiérrez Martínez, presidente de la Mesa Directiva de la H. LX Legislatura, quien destacó la labor del Instituto en la preservación y conservación del patrimonio cultural de la nación.
Diego Prieto Hernández dijo que el INAH es una de las instituciones más importantes de la patria y, posiblemente, única en su tipo en el mundo, luego de recordar que fue creado el 3 de febrero de 1939, por el presidente Lázaro Cárdenas, y con el cual inició una política de Estado que reconoció el valor del patrimonio cultural.
La iniciativa cardenista buscaba unificar antiguas direcciones y departamentos en un solo organismo que concentrara los trabajos de conservación, protección e investigación del patrimonio, cuya amplitud se hizo evidente años antes, con el hallazgo de la Tumba 7 de Monte Albán, en Oaxaca, descubierta por Alfonso Caso.
El director general del INAH se refirió a la labor de la institución en el Estado de México, y recordó que, el 16 de abril de 1977, se estableció el Centro INAH de la entidad para vigorizar las labores en esta demarcación, con más de dos mil asentamientos prehispánicos registrados, los cuales conservan un espectro enorme de testimonios sobre el pasado.
Asimismo, recordó el hallazgo de mamuts en Tultepec como uno de los más importantes a nivel mundial registrados en fechas recientes, así como la riqueza paleontológica localizada en el territorio mexiquense, a la que se suman espléndidas muestras de pintura rupestre, prueba del establecimiento de grupos humanos anteriores a la agricultura.
De la época prehispánica, citó a Teotihuacan como una de las mayores ciudades de Mesoamérica, que en 1987 fue declarada como Patrimonio Mundial, y mencionó otros sitios como Chimalhuacán, Malinalco, Calixtlahuaca, Tecotzinco, El Conde, Acozac, Huexotla y Santa Cecilia Acatitlán.
En el Estado de México se cuentan por centenas los monumentos históricos, dijo el antropólogo Diego Prieto, al destacar al Antiguo Colegio de San Francisco Javier, en Tepotzotlán, también inscrito, desde 2010, en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, como parte del Camino Real de Tierra Adentro; y los tramos mexiquenses del sistema hidráulico del Acueducto del Padre Tembleque, reconocido como Patrimonio de la Humanidad desde 2015.
El patrimonio cultural que la institución investiga y conserva no solo se centra en los monumentos, “pues esas piedras cobran sentido cuando significan algo para los grupos humanos que forman esta patria. El patrimonio no puede entenderse solo en su materialidad, sino en su simbolismo y en la inmaterialidad de las culturas que hoy se expresan en distintos grupos culturales, lingüísticos, sexuales, étnicos”, puntualizó el titular del INAH.
Por lo anterior, dijo, en el Estado de México debemos destacar las poblaciones de extracción matlazinca, mazahua, nahua, otomí, tlahuica y a los migrantes de otras entidades que residen en el Estado de México, principalmente en las áreas conurbadas a la Ciudad de México.
El antropólogo señaló que el INAH debe encargarse de la deuda histórica con los pueblos originarios del país y afrodescendientes. “Ya no se trata solo de fortalecer la identidad de México como nación, se trata ahora de visibilizar las diversas identidades que hacen a México un país pluricultural”.
Al hablar de los acervos bajo resguardo de la institución, señaló que el Instituto tiene la Fototeca más grande de América Latina, e importantes acervos documentales, como los códices del reservorio de la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia; una red de 194 zonas arqueológicas abiertas al público, incluyendo una paleontológica, una red de 162 museos; en ambos, el año pasado recibió cerca de 28 millones de visitantes.
“Este año, por primera vez, el Museo Nacional de Antropología tendrá más de tres millones de visitantes; en tanto, la Zona Arqueológica de Teotihuacan —la más visitada del país— el año pasado tuvo más de cuatro millones 450 mil visitantes y, probablemente, este año rebase los cuatro millones y medio de visitantes: esa es la dimensión de nuestra tarea”.
Junto con su agradecimiento a la LX Legislatura, Diego Prieto refrendó el compromiso del INAH de continuar la tarea de asegurar la protección de nuestro inmenso patrimonio cultural, especialmente del Estado de México.
A ocho décadas de su creación, el INAH se ha consolidado como el organismo que garantiza la investigación, conservación, protección y difusión del patrimonio arqueológico, antropológico, histórico y paleontológico de México, dijo en su oportunidad la diputada Beatriz García Villegas, en representación de la LX Legislatura.
“La antropología y el patrimonio cultural han desempeñado un papel rector en el desarrollo de nuestra nación, lo que se puede advertir a partir de la Revolución Mexicana, cuando antropólogos como Manuel Gamio incidieron en la política nacional, trazando algunos de los principales ejes del proyecto de país posrevolucionario”.
De lo anterior, la legisladora destacó la identidad nacional, emanada de la trayectoria histórica y materializada con el patrimonio, la cual claramente podría ser la fuente de cohesión en un país que salía de una cruenta guerra civil, dijo, y más adelante señaló: “El reconocimiento de la importancia de ese patrimonio generó una oportunidad para reivindicar y tomar en cuenta las grandes culturas indígenas, para promocionar una mejora en sus condiciones de vida y fortalecer su presencia y participación en los asuntos del país”.
García Villegas recordó que la representación de INAH en el Estado de México se instaló en 1977 con el Centro Regional Michoacán-Estado de México, formalizándose como Centro INAH Estado de México en 1979, bajo la dirección del arqueólogo Roberto Gallegos Ruiz. La labor de la institución en la entidad ha permitido el registro de 2,275 sitios arqueológicos, 5,200 monumentos históricos, la inscripción de cuatro sitios Patrimonio Mundial en la Lista de la UNESCO y 15 zonas arqueológicas, “evidenciando la enorme custodia que tiene en nuestra entidad”.
Finalmente, consideró fundamental coadyuvar y participar desde cada una de las comunidades en la recuperación y protección del patrimonio, para revitalizar la memoria colectiva e identidad en cada uno de los grupos sociales, y exhortó a los mexiquenses a impulsar el proceso de apropiación social de los bienes culturales para reforzar su dimensión simbólica del pasado y fortalecer el sentido de pertenencia de barrios, pueblos, y colonias.
“El patrimonio cultural refleja nuestra historia, identidad y continuidad a lo largo de los años, como civilización en una gran nación; a la vez, constituye una gran obligación para conservarlo, a fin de que futuras generaciones se den cuenta de su valor. Justamente esa ha sido la tarea del INAH, que ha asumido con responsabilidad durante 80 años; por ello, nos encontramos conmemorando y celebrando la grandeza de su existencia”.
La sesión finalizó con la entrega de un reconocimiento al Instituto, que recibió su director general, Diego Prieto, y otro más para el Centro INAH Estado de México, el cual fue entregado a su titular, Antonio Huitrón.