A lo largo de ocho décadas, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha conservado, investigado y difundido el patrimonio de cada una de las entidades que conforman la federación, consolidando así su presencia y prestigio. El Congreso del Estado de Campeche llevó a cabo una sesión solemne para reconocer el trabajo de una institución que “nos ha colocado frente a nuestro propio espejo histórico”.
Así lo expresó el diputado Ramón Méndez Lanz, presidente de la Junta de Gobierno del Poder Legislativo estatal, en el acto conmemorativo que estuvo presidido por el director general del INAH, el antropólogo Diego Prieto Hernández, quien reiteró el compromiso de este organismo octogenario, pero más vigente y necesario que nunca con el patrimonio de los campechanos.
El titular del INAH dimensionó el universo en custodia de la institución: una red de 160 museos, 191 zonas arqueológicas abiertas al público y una de carácter paleontológico, Rincón Colorado, en Coahuila; además de ser depositario de bibliotecas, archivos, fototecas, osteotecas y ceramotecas. Un patrimonio invaluable que es preservado, en buena parte, por profesionales formados en sus centros de investigación y educación superior, entre ellos las escuelas nacionales de Antropología e Historia (ENAH), y de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM).
En este mosaico cultural que es México, dijo, “Campeche ocupa un lugar preponderante”, de manera que los especialistas del Centro INAH Campeche contribuyen a reconstruir la historia regional a partir del estudio de su herencia cultural, incluida la recuperación de las culturas mayas del pasado y del presente. Vestigios de ese pasado se encuentran en los 910 sitios arqueológicos registrados en su territorio.
Campeche representa la segunda entidad con más zonas arqueológicas abiertas al público, 16 en total: Edzná, Xcalumkin, Hochob, Chunhuhub, Dzibilnocac, Santa Rosa Xtampak, Tabasqueño, Tohcok, Kanki, Balamkú, Chicanná, Xpuhil, Becán, Hormiguero, El Tigre y, por supuesto, Calakmul, inscrita como Bien Mixto en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
“Cada uno de estos lugares deja ver una parte del legado de los mayas a la humanidad, y nos confirma su sabiduría, capacidad innovadora y sensibilidad estética, así como la perfección técnica alcanzada por una civilización que trasciende hasta el presente, para reafirmarse como una gran cultura que conserva sus variantes lingüísticas, creencias y costumbres ancestrales”, manifestó.
La antigua ciudad maya de Calakmul y sus bosques tropicales, junto con la ciudad fortificada de Campeche, son los dos bienes que Campeche posee en la prestigiada lista. Sin embargo, sus valores están en cada comunidad, pues en todo el estado se contabilizan tres mil 267 inmuebles de valor patrimonial, casi dos mil 300 en su capital, de los cuales 133 forman parte de su Centro Histórico.
El director general del INAH hizo hincapié en el trabajo que la institución ha realizado con el apoyo del Gobierno del Estado de Campeche, en la rehabilitación y actualización museográfica de los museos de Arqueología Subacuática, en el Fuerte de San José el Alto; y de Arquitectura Maya, en el Baluarte de Nuestra Señora de la Soledad.
Actualmente, abundó, se realiza la conservación integral y actualización de la museografía del Museo de Arqueología Maya. Fuerte de San Diego. La labor abarca la puesta al día de los sistemas de seguridad,
iluminación y exhibición de las colecciones arqueológicas, entre ellas piezas mayas nunca antes vistas, bajo una nueva lectura que contempla las más recientes investigaciones sobre esta civilización a nivel regional.
Tales trabajos son supervisados por la arquitecta Claudia Escalante, directora de Museos del Centro INAH Campeche, y se contará con la curaduría de Karina Romero, experta de la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones del INAH, que ha estado detrás de exitosas muestras como Las huellas de Buda, así como Belleza y virtud, que se presenta actualmente en el Museo Nacional de Antropología.
Diego Prieto aprovechó la ocasión para recordar que en tierras campechanas nació uno de los personajes ilustres del INAH, el profesor Román Piña Chan, pionero de la antropología mexicana y explorador de más de 50 sitios arqueológicos, quien benefició a varias generaciones de especialistas con sus conocimientos y entusiasmo.
La sesión solemne por el 80 aniversario del INAH en el Congreso de Campeche, contó con la presencia de diputados de la LXIII Legislatura, y también estuvo presidida por el secretario de Cultura estatal, Delio Ricardo Carrillo, y el presidente de la Comisión de Cultural de dicha asamblea, Óscar Eduardo Uc Dzul.
Ramón Méndez Lanz, presidente de la Junta de Gobierno del Congreso de Campeche, calificó al INAH como una institución pública que es “referente de la 
preservación patrimonial de México”, la cual atendiendo a sus tareas dispuestas en la ley: la conservación, investigación y divulgación de la riqueza cultural del país, “ha ido escribiendo su propia historia, con un legado invaluable que es consecuencia de su labor científica, profesional y administrativa.
“El INAH —continuó— nos ha colocado frente a nuestro propio espejo histórico, donde se refleja lo que fuimos, nuestra naturaleza humana y cultura ancestral. Todo ello refuerza nuestra memoria e identidad. Este instituto nos trae al presente nuestro pasado, para que nunca olvidemos lo que somos y lo que queremos ser. De ese tamaño es la aportación del INAH a México y a los mexicanos”, concluyó el legislador.
Por parte del INAH, a la sesión solemne acudieron los coordinadores nacionales de Arqueología y Centros INAH, Pedro Francisco Sánchez Nava y Omar Vázquez; los directores de los Centros INAH de Tabasco y Chiapas, Carlos Arturo Giordano y Juan José Solórzano, respectivamente. Del Centro INAH Campeche estuvieron los extitulares Luis Fernando Álvarez, Lirio Sánchez, Antonio Benavides, y su actual responsable, la arqueóloga Adriana Velázquez Morlet.
(Fotografías: Héctor Montaño/INAH)